Diminuto pez produce ruido equiparable al de un disparo

Un pequeño pez llamado Danionella cerebrum redefine el concepto de “no juzgar un libro por su portada”. Este animal, del tamaño de una uña humana, emerge como una criatura singular en el reino acuático. El pez, descubierto en los riachuelos de Myanmar, destaca no solo por su minúsculo tamaño. También por su capacidad de generar sonidos que rivalizan en intensidad con los de un disparo de arma de fuego. El sonido que genera supera con facilidad al percibido en un concierto de rock o en las sirenas de las ambulancias.

Diminuto pez produce ruido equiparable al de un disparo1

El sonoro Danionella cerebrum.

Este sorprendente hallazgo es cortesía de un equipo de investigadores afiliados al Hospital Universitario Charité, en Berlín, que exploraban las capacidades sonoras de este peculiar vertebrado. El D. cerebrum, a pesar de contar con el cerebro más pequeño conocido entre los vertebrados y medir apenas 12 mm de longitud, posee una habilidad extraordinaria para producir sonidos que superan los 140 decibeles.

A diferencia de otros peces, que suelen emplear el gas contenido en sus vejigas natatorias (el mismo órgano que inflan y desinflan para subir o descender en el agua) para generar sonidos, el Danionella cerebrum optó por una estrategia más ingeniosa. Este pequeño pero formidable animal utiliza un grupo de músculos especializados para retraer un hueso de sus costillas, creando así un impacto sonoro notable al impactar la vejiga.

El proceso se asemeja a estirar el elástico de un tirachinas para luego liberarlo, logrando una producción de sonido eficiente y resistente a la fatiga. Es como si alguien usara baquetas para tocar la batería mientras otros intentan con las manos. Más allá de su indudable curiosidad, la capacidad sonora del Danionella cerebrum ofrece fascinantes perspectivas sobre la comunicación entre peces y sus mecanismos adaptativos.

anatomia Danionella cerebrum

Se sugiere que estos sonidos podrían tener roles en la competencia agresiva entre machos, pues solo ellos cuentan con costillas lo suficientemente resistentes, o servir como mecanismos de navegación en condiciones de visibilidad reducida. Sin embargo, las pruebas realizadas en ambientes controlados como acuarios revelan que, a pesar de la potencia sonora, a cierta distancia y detrás de barreras físicas, el ruido se percibe simplemente como un “clic” suave.

Mucho por descubrir.

El Danionella cerebrum nos recuerda la vastedad de misterios que aún residen en los rincones más inesperados de nuestro planeta. Su extraordinaria capacidad de generar un sonido tan potente, a pesar de su tamaño diminuto, no solo desafía nuestras percepciones sobre la biología de los peces. También abre nuevas vías de investigación en el estudio de la comunicación y adaptación animal. Este pez diminuto pero potente nos enseña que, en la naturaleza, las sorpresas vienen en todos los tamaños y que aún tenemos mucho que aprender sobre las maravillas del mundo natural.

Con el Danionella cerebrum, la ciencia da un paso más hacia la comprensión del intrincado lenguaje de la vida acuática, demostrando que incluso los seres más pequeños pueden tener un enorme impacto en nuestro conocimiento del mundo viviente. Y seguramente te preguntas porqué lo estudió personal de un hospital. Bueno, se trata de un organismo modelo muy socorrido en experimentos biomédicos, así como los ratones.

Quizá te interesa:

Deja un comentario