Dos tablillas con casi cuatro milenios de antigüedad localizadas en Irak en la década de 1980 revelan un increíble potencial lingüístico. Así lo confirma un estudio publicado hace algunas semanas en la revista Revue d’assyriologie et d’archéologie orientale. El contenido de estas piezas permitiría a los arqueólogos desentrañar un antiguo y misterioso idioma que hablaron los habitantes de la región de Canaán.
Hablamos de una zona extremadamente importante para la historia, actualmente ocupada por los territorios de Cisjordania, Palestina e Israel, así como parte de Siria y Líbano. El idioma en cuestión es el amorreo, hablado por el pueblo homónimo que se asentó en Mesopotamia alrededor del 2000 a.C. Tras la debacle de los sumerios, esta civilización se expandió por la zona y estableció lo que hoy se conoce como el Primer Imperio Babilónico.
Hasta el análisis de estas tablillas, el amorreo era un idioma prácticamente desconocido y muchos llegaron a considerarlo una especie de leyenda. “Nuestro conocimiento del amorreo era tan lamentable que algunos especialistas dudaban de su existencia”, señalaron Manfred Krebernik y Andrew R. George, autores del estudio publicado en la revista francesa.
“Las dos tablas incrementan sustancialmente lo que sabemos del amorreo, pues no solo aportan nuevas palabras, sino oraciones completas. Entonces, revelan un nuevo vocabulario y gramática”, agregan los expertos que analizan los artefactos históricos desde hace casi una década.
La nueva “Piedra de Rosetta”.
El incalculable valor de estas tablillas de arcilla radica en que, además de las inscripciones en amorreo, incluyen una traducción de las frases al acadio, otro idioma antiguo cuya gramática es más conocida. De hecho, esta característica permite que las tablillas se comparen con la famosa Piedra de Rosetta, una escultura que sentó las bases para la comprensión de los jeroglíficos egipcios.
Y es que la piedra de Rosetta incluye traducciones de los jeroglíficos egipcios al griego antiguo, posibilitando que una serie de textos hasta entonces indescifrables adquirirán un significado. De forma parecida, las tablillas desenterradas en Irak nos permitieron conocer un poco más sobre el amorreo.
Según los investigadores, estas tablillas se confeccionaron para servir como una “guía turística”. De forma que los turistas que hablaban acadio podían conocer detalles de los amorreos. “Se encuentran frases sobre cómo preparar comida, honrar a un rey y hacer un sacrificio. Incluso incluyeron una canción de amor… son escritos que abarcan toda la esfera de la vida”, apuntó Yoram Cohen, otro experto que no formó parte del estudio pero que fue entrevistado por Live Science.
En otro fragmento de las tablillas se describen las deidades amorreas (adoptaron una religión politeísta) y sus equivalentes mesopotámicos. Algunos expertos consideran que la publicación de estas tablillas es problemática. Principalmente porque se traficaron ilegalmente, se mantienen ilegalmente en colecciones privadas inaccesibles y no han sido inspeccionadas de primera mano por los académicos. Todo esto va en contra de los estándares académicos y éticos actuales.