En Eslovenia, precisamente en Máribor (la segunda ciudad más grande del país), en la calle Vojašniška podemos encontrar la vid (conocida) más vieja del mundo. El tronco de la planta descansa sobre las paredes claras de una casa, como si se hubiese petrificado en el lugar. Pero sus hojas son verdes, frondosas y, si asistes en la época correcta, podrás ser testigo de la vid más antigua del mundo dando frutos.
Vida y Estilo
Amigos construyen casas minúsculas para alejarse del estrés de la ciudad
A medida que crecemos y nos vamos haciendo viejos, es común que nos alejemos de los viejos y buenos amigos de la infancia y la adolescencia. Cada uno tiene que dedicarse a sus asuntos, todos siguen caminos diferentes y lo único que queda es el recuerdo de aquella bonita amistad.
10 monumentos enigmáticos más antiguos que Stonehenge
Para muchas personas, Stonehenge es una referencia cuando se habla de las civilizaciones más antiguas, la huella de aquellos seres humanos que recién comenzaban a desacostumbrarse de sus orígenes como cazadores-recolectores. Sin embargo, no es la única evidencia, y para muchos podría resultar sorprendente conocer la cantidad de construcciones misteriosas que sobrevivieron al tiempo, de una u otra forma, de épocas mucho más antiguas y en lugares a los que pocos se atrevieron a ir.
Egipto planea reconstruir el Faro de Alejandría
130 metros, o un edificio de 43 pisos. Así de grande era el Faro de Alejandría, aquel que, durante muchos siglos, fuera una de las mayores construcciones erguidas por la humanidad. Tanta imponencia le valió un lugar entre las siete maravillas del mundo antiguo, de las que solo la Gran Pirámide de Guiza se mantiene en pie hasta nuestros días.
El Monte de las Cruces, un lugar fascinante y misterioso
El Monte de las Cruces – Kryžių kalnas en lituano – es un sitio de peregrinación ubicado a unos 12 kilómetros al norte de la ciudad de Šiauliai, conocida popularmente como la capital de Lituania del Norte.
La pareja que construyó una isla flotante para vivir con autosuficiencia
Wayne Adams y Catherine King, una pareja de ciudadanos canadienses de 66 y 59 años respectivamente, son los orgullosos propietarios de “Freedom Cove” (“Refugio de la Libertad”, en español), una colorida casa flotante cerca de la costa de Tofino, en la Columbia Británica, Canadá.