Aquí tienes una dosis de hechos realmente espeluznantes, solo porque es jueves. Jamás des por sentado que conoces este mundo, pues allá afuera existen toda clase de fenómenos, seres y objetos que provocan mucho miedo.
Un mundo nos vigila, ¿o no?
“Existen dos posibilidades: estamos solos en el Universo o no lo estamos. Ambas resultan igual de aterradoras”. —Arthur C. Clarke.
Los socavones.
En este preciso instante, justo bajo tus pies podría haber una enorme caverna subterránea. Lo peor es que podría colapsar dando lugar a un enorme sumidero capaz de tragarte por completo. Es un fenómeno que sucede más a menudo de lo que crees.
La terrible crucifixión.
Cuando alguien es crucificado, rara vez muere desangrado. De hecho, lo más probable es que pierda la vida por asfixia o sofocamiento. La forma en que disponen los cuerpos hace que resulte casi imposible respirar. Su única oportunidad es mantenerse de pie, en lugar de simplemente colgar. Después de muchas horas, el esfuerzo resulta excesivo y esto conduce a la falta de oxígeno, la pérdida de conocimiento y la muerte.
El gato que predecía la muerte.
Existió un gato llamado Oscar que predecía la muerte. El animal se crio en el pabellón psiquiátrico del Steere House Nursing and Rehab Center en Providence, Rhode Island. Cuando percibía que el fin de un paciente estaba cerca, iba hasta su cama para acurrucarse y dormir junto a su lado hasta que moría.
Cerebro seco.
La rinorrea cerebrovascular es un padecimiento tan aterrador como el nombre. Si golpeas tu cabeza de forma específica, el líquido cefalorraquídeo (LCR) puede gotear por la nariz y llevarte a la muerte en cuestión de días con el cerebro drenado. Aunque acudas a consulta médica, lo más probable es que diagnostiquen una secreción nasal excesiva y recete algún antihistamínico. Dicen que la única forma de identificar el LCR es por la formación de un anillo rosado cuando te frotas con un pañuelo de papel.
La casa de los huesos.
Al interior de una iglesia en la República Checa existe un sitio llamado osario de Sedlec. El lugar está decorado con cráneos y otros huesos humanos. Estiman que en este lugar descansan los restos de hasta 40 mil individuos.
Sin anestesia.
Hasta 1986, muchos médicos asumían que los bebés eran incapaces de sentir dolor. Por eso, ni siquiera los anestesiaban durante una operación.
Joven y viejo.
Nunca volverás a ser tan joven como en este preciso instante. En otras palabras, eres más viejo que nunca.
La Tierra.
Nuestro planeta es una excepción en un universo increíblemente hostil. Todo aquello que conocemos y lo que hemos alcanzado como especie reside en este pequeño e insignificante trozo de roca.
Chinches.
Con una temperatura ideal, las chinches pueden sobrevivir hasta un año sin alimentarse. Al alcanzar la adultez, las hembras ponen hasta 300 larvas a lo largo de su vida. Podrías invertir una fortuna en exterminarlas y eventualmente volver a infestarte. Las chinches se han hecho famosas por regresar después de casi haber sido erradicadas.
Pégale al gordo.
Al ganar la lotería automáticamente incrementan las probabilidades de que algún conocido, incluso un miembro de tu familia, te asesine.
Gusano de la muerte.
El gusano de la muerte (Lonomia Caterpillar) es una oruga con un veneno muy potente. Con un solo roce en la piel, puede desencadenar hemorragias internas en el cerebro y otros órganos.
Ñam, Ñam.
Si un oso llega a atacarte, no intentará asesinarte como otros depredadores. Simplemente empezará a comerte.
Muertes inexplicables.
En 1959, localizaron a nueve excursionistas rusos completamente mutilados de una forma realmente extraña. Las muertes en el paso Dyatlov son un misterio que sigue intrigando a todos, pues nadie pudo explicar lo que causó esta tragedia.
Cadáveres centenarios.
Se cree que, en el lago Superior, un enorme lago de agua dulce en Norteamérica, hay cadáveres con más de un siglo de antigüedad. Las bajas temperaturas y una reducida cantidad de oxígeno, provocan que los cuerpos no se descompongan al ritmo que lo harían en condiciones normales. Evidentemente, estos cadáveres no lucen como el día en que murieron, pero son restos humanos reconocibles. Lo más probable es que estén cubiertos de una grasa corporal a causa de la saponificación.
Sí! Que se note que es jueves terrorífico… Muy interesante artículo.