Lucy, como se llama esta hermosa hembra Beagle, siempre se está metiendo en problemas. Sus dueños notaron que cada día al llegar a casa las sillas habían sido cambiadas de lugar y unas misteriosas huellas aparecían sobre el mostrador. En ocasiones, la comida simplemente desaparecía.
Unas semanas antes de que fuera grabado este video, la familia tuvo visitas y Rodd, el dueño, había preparado un filete asado. Mientras estaba en otra habitación, veía como la mandíbula de su amigo invitado casi cae al piso. A continuación le dijo ¡AMIGO, tu perro está en el horno! Rodd corrió hasta la cocina y encontró a Lucy con la puerta del horno grande abierta, degustando un delicioso filete asado.