El hielo seco no es hielo propiamente dicho, se trata de CO2 es de estado sólido, y se llama “seco” porque pasa por el proceso de sublimación, o sea, de solido a gaseoso sin pasar por la fase líquida.
Debido a que es extremadamente frío, y debido a que pasa directamente del estado sólido al estado gaseoso, el hielo seco también proporciona algunas experiencias interesantes.
Pero, ¿cómo se fabrica?
¿Eres ingeniero y no sabes en que invertir tu conocimiento para ganar dinero? Aquí hay una opción: el Efecto Hutchison. Pero espera, no te emociones, que puede tratarse de solamente una leyenda urbana, sin embargo, para demostrar eso se necesita que alguien investigue experimentalmente.
El Efecto Hutchison (anti gravedad) es un conjunto de fenómenos descubiertos accidentalmente por John Hutchison durante los intentos de estudiar las ondas longitudinales de Tesla (Tesla tenía que ser) en 1979. En otras palabras, el efecto Hutchison no es simplemente un efecto singular: sino muchos. La leyenda dice que el fue documentando sus avances en videos como el que se puede ver a continuación.
Desde hace miles de años las cabezas pensantes han estado tratando de determinar si el hombre es bueno por naturaleza, como creía Rousseau, Sócrates o Montaigne, o se inclina por el mal como argumentaba Hobbes, Maquiavelo o la teología cristiana, mediante el pecado original. El debate continúa fuerte, pero ahora hay una nueva voz a tomarse en consideración: la neurociencia, que está en vías de estimar cuantitativamente la bondad humana.
¿Somos buenos o malos? Hay un pequeño porcentaje (alrededor del 20%) de personas que actúan siempre en un modo compasivo y respetuoso de las reglas. En el otro extremo, otra porción más pequeña (alrededor del 4%) tenemos a los que sistemáticamente actúan en el orden y la conducta antisocial, incluyendo al 1% de los individuos peligrosos. Pero el caso más interesante sucede en tierra de nadie, donde se mueven la mayoría de los mortales, ese 60-80% de las personas que actúan con bondad o maldad dependiendo de cómo sople el viento. Es decir, actúan influenciados por el comportamiento de los demás, quienes están buscando las normas punitivas que prevalecen en el espacio-tiempo donde se encuentran.
Estos 9 dibujos fueron hechos por un artista bajo la influencia del LSD, formaron parte de una prueba llevada a cabo por el gobierno de los EE.UU. durante su coqueteo con las drogas alucinógenas a finales de los años 1950, en los albores de la Guerra Fría. Al artista se le propino una dosis de LSD-25 y libre acceso a una caja llena de crayones y lápices. El tema pintar era el médico que lo inyectó.
Estamos programados socialmente para conformarnos, el dicho de “¿dónde va Vicente?, donde va la gente” tiene mucho más de cierto de lo que pensamos. Así lo demostró el experimento del elevador de Solomon Asch, una reveladora e histórica prueba que mostró con una claridad ridícula como es que nuestra individualidad como seres sociales se ve totalmente devastada frente a la conducta en multitudes y la forma tan fácil cómo cedemos a la presión social, a pesar de carecer de total lógica. Concluyendo que el comportamiento de masas, al contrario de lo que supondríamos, es totalmente irracional.
En 1983, un equipo de científicos profundamente piadoso llevó a cabo un experimento radical en un centro de investigaciones no revelado. Los científicos habían teorizado que un ser humano sin acceso a los sentidos o formas de percibir los estímulos sería capaz de percibir la presencia de Dios.
