Los científicos desconocen el comportamiento que tendrá El Niño en 2023, pero resulta muy plausible que el cambio climático amplifique los efectos de este fenómeno en diversas regiones del planeta. Hablamos de un fenómeno natural que sucede con una periodicidad de entre dos y siete años. Se produce cuando las aguas del Océano Pacífico ecuatorial incrementan su temperatura hasta 3°C sobre el promedio (se conoce como La Niña cuando la temperatura disminuye en la misma proporción). Esto desencadena una serie de efectos que puede sentirse en todo el planeta.
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Yacobabad: ciudad con temperaturas superiores a lo que soporta el humano
En la cúspide del verano, las temperaturas en Yacobabad superan los 52 grados Celsius. Esta ciudad en Pakistán es vigilada por los expertos, pues creen que el calentamiento global empeorará la situación. Cuando el calor arrecia en Yacobabad, las calles lucen desiertas y los habitantes hacen lo mejor que pueden para refrescarse.
Desarrollan pintura “súper blanca” para enfriamiento radiactivo
Hablando de colores opuestos, nada supera al clásico blanco y negro. Sin embargo, ¿alguna vez te preguntaste qué tan diferentes pueden ser estos colores? Seguramente has escuchado de Vantablack, una sustancia construida con nanotubos de carbono que se considera la más oscura existente hasta la fecha. Esta cosa es tan oscura que absorbe el 99.965% de la radiación de luz visible que incide sobre ella. Y Vantablack ya tiene un digno rival en blanco.
Este mapa climático revela un destino funesto para la humanidad
Un gigantesco asteroide que impactó a la Tierra hace 66 millones de años provocó un cambio climático radical. El poderoso evento equivaldría a la energía liberada en la detonación de mil millones de bombas nucleares. Las rocas fueron vaporizadas al instante y los cielos se volvieron opacos por la abundante ceniza, que gradualmente se depositó en la superficie.
2070: año en que miles de millones sufrirán un calor infernal
Entre 2 y 3.5 mil millones de humanos sufrirán un clima insoportable para el año 2070. Es la conclusión a la que llegó un equipo de investigación internacional liderado por el ecologista Marten Scheffer, de la Universidad de Wageningen. Lógicamente, la condición que propiciará este escenario apocalíptico es el aumento global de la temperatura promedio anual promovido por el cambio climático.
Emisiones de CO2 no aumentaron en 2019
En 2019, las emisiones globales de dióxido de carbono (CO2) ascendieron a 33,300 millones de toneladas, el mismo valor que en 2018. Contra todas las expectativas, la cifra se mantuvo estable y definitivamente es una buena noticia. Dicha información se puede corroborar en el informe anual de la Agencia Internacional de Energía (IEA).