Transmisión del infierno en vivo y a todo color

Crímenes aterradores como el homicidio, la violación y toda clase de atrocidades ya se transmiten a miles de personas en tiempo real. El episodio The National Anthem, de la serie Black Mirror, es uno de los más polémicos de esta producción hasta la fecha y aunque el creador de la serie, Charlie Brooker, lo haya negado rotundamente existe la posibilidad de que haya un antecedente real a la historia ficticia en la escena política de Gran Bretaña. Esto habría sucedido en Oxford, Reino Unido, allá por 1985.

De acuerdo con los rumores, un grupo de jóvenes (miembros de la aristocracia británica) ansiosos de sexo y drogas se reunieron en la sede del exclusivo club Piers Gaveston Society. Los novatos apenas podían esperar para formar parte del selecto grupo de libertinaje. Al unísono, entonan el lema de la sociedad: «nadie jamás recordará a un hombre satisfaciendo tanto a otro».

A continuación, el líder de aquel evento da la orden. Sin ningún tipo de reserva y en un acto de completo hedonismo, los jóvenes se quitan los pantalones y la ropa interior, se acarician los genitales y a continuación los introducen en las fauces de cerdos muertos. El protagonista de este traumático ritual de iniciación habría sido David Cameron, un joven que años más tarde se habría convertido en Primer Ministro de Gran Bretaña.

Esta historia, negada por Cameron, vio la luz en una biografía titulada Call Me Dave, una publicación de 2015 obra Michael Ashcroft e Isabel Oakeshott. Apenas llegó a los estantes en las librerías del Reino Unido, los lectores establecieron una conexión inmediata con el episodio presentado en Black Mirror, exhibido cuatro años antes.

Pese a la negación de las partes involucradas, la ficción no suele estar tan lejos de la realidad. De la misma forma que el episodio del cerdo, Internet ha permitido la difusión, en tiempo real, de varios crímenes que son seguidos por multitudes.

Un streaming infernal.

Desde que la tecnología de transmisión en vivo (streaming) fue incorporada a las redes sociales, los criminales se han valido de estos recursos para difundir muertes, violaciones y toda clase de atrocidades. Las plataformas más socorridas en este sentido son Facebook Live, lanzado en 2016 y el streaming de YouTube, una característica disponible desde 2017 para aquellos canales con al menos 100 suscriptores.

El asesino de Facebook Live.

Uno de los casos que mayor repercusión ha tenido en el mundo en línea es el de Steve Stephens, popularmente referido como «el asesino de Facebook Live», quien asesinara a un anciano residente de Cleveland, en los Estados Unidos. La víctima respondía al nombre de Robert Godwin, un anciano de 74 años que regresaba a su hogar tras pasar la época de pascua con su familia.

En las terribles imágenes que se hicieron virales en Internet, el homicida se aproxima a la víctima y solicita que repita las palabras «Joy Lane», nombre de pila de su exnovia que había puesto fin a la relación. Godwin menciona las palabras y es alcanzado por un disparo a quemarropa. En una segunda transmisión, aparece Stephens afirmando que ha disparado y asesinado a 14 personas y que no está dispuesto a detener el frenesí.

Aquella región de Cleveland se sumió en un profundo pánico, por lo que las autoridades empezaron a ofrecer una recompensa de hasta US$ 50 mil a quien ofreciera información sobre el paradero del sospechoso. Un par de días después, unos empleados de un drive-thru reconocieron al criminal y dieron aviso a la policía.

Tras una persecución por las calles de esta ciudad, Steve Stephens terminó suicidándose de un disparo en la cabeza. Los otros supuestos homicidios que llevó a cabo nunca fueron confirmados.

Las empresas toman medidas.

Tras la enorme repercusión que tuvo el caso de Steve Stephens, las empresas responsables empezaron a tomar medidas para limitar la difusión de contenido violento. Por ejemplo, Facebook anunció que redoblaría esfuerzos para identificar y eliminar videos donde se divulgaran crímenes, sumando 3,000 nuevos moderadores a los 4,500 ya existentes para analizar las publicaciones sospechosas.

Por su parte, YouTube apuesta por las campañas educativas, como una serie de videos contra el bullying publicados en colaboración con algunas personalidades influyentes en su comunidad.

Los crímenes más polémicos que fueron transmitidos en vivo durante 2017.

Un linchamiento visto por un país entero.

En el mes de febrero, un par de ciudadanos eslovenos fue a prisión tras golpear a una víctima hasta la muerte y transmitir el acto en vivo. Cuando la policía recibió la denuncia anónima la publicación ya acumulaba más de 250,000 visualizaciones y 400 acciones. A las autoridades les tomó horas encontrar el lugar donde había sido golpeada la víctima, todavía con vida, que no logró resistir a las heridas. De acuerdo con el titular de un periódico local «Andrej Cekuta murió mientras Eslovenia veía».

El asesinato que se transmitió accidentalmente.

También en febrero, a través de Facebook Live se mostró el video de una mujer embarazada que cantaba mientras conducía un automóvil en Chicago, Estados Unidos. Con ella viajaban su novio y un sobrino de 2 años. De la nada, se escucha una ráfaga de disparos proveniente del exterior – se trataba de una emboscada. Las balas alcanzaron al hombre y al menor, que terminaron muriendo. La conductora es herida en el abdomen, pero logra escapar con vida y buscar ayuda.

Una violación colectiva en Facebook.

En marzo, un episodio de violación colectiva se transmitió a través de Facebook Live. Seis jóvenes atacaron a una adolescente en Estados Unidos. Pese a que un total de 40 personas vieron en vivo las escenas, ninguno denunció el crimen. El departamento de policía de la localidad trató este caso como abuso sexual con el agravante de creación y difusión de pornografía infantil. Dos de los violadores fueron identificados y puestos en prisión.

El ruso que casi es linchado en Cancún.

En el mes de mayo, un ciudadano de origen ruso llamado Aleksei Makeev fue abordado por un grupo de personas en Cancún. La enardecida turba pretendía cobrarle los múltiples insultos e improperios que había lanzado contra ciudadanos locales desde hacía tiempo, mismos que difundía a través de YouTube. Las cosas terminaron saliéndose de control y Makeev asesinó a uno de los jóvenes que fue a confrontarlo. Como respuesta, los locales llevaron a cabo un intento de linchamiento que fue impedido por la llegada de la policía. Toda la escena fue transmitida en vivo a través de diversos dispositivos móviles e incluso desde un dron.

El traficante que cayó por presumido.

En el mes de junio la policía de Jacksonville, en Florida, sorprendió a un traficante de drogas llamado Breon Hollings, de 22 años, al acudir de forma sorpresiva a su residencia. Resulta que este sujeto se encontraba transmitiendo en vivo a través de Facebook, exhibiendo varios fajos de dólares. Cuando notó la llegada de los agentes – qué advirtieron de su presencia a través de un megáfono, el delincuente intentó escapar pero terminó yendo a prisión. En el lugar se encontraron armas y cocaína.