El programador de «Solitario» no ganó un solo peso por el juego

Si tuviste la oportunidad de manipular una computadora entre 1990 y el año 2000, seguramente recuerdas Solitario. Y quizá jamás te preguntaste quiénes integraron el equipo que desarrolló este juego tan socorrido, es precisamente aquí donde viene una vuelta de tuerca en la historia. Empecemos por mencionar que todo fue trabajo de una sola persona, y el encargado de desarrollarlo no recibió ni un solo centavo por su obra.

El nombre del desarrollador es Wes Cherry. Y no se encontraba trabajando para Microsoft por casualidad, en esa época era becario en la empresa de Bill Gates. De hecho, Solitario ni siquiera fue un encargo de la empresa. Wes desarrolló el juego como una forma de pasar su tiempo libre, y cuando lo terminó lo cedió como un regalo para Microsoft.

«Escribí los códigos para Windows 2.1 durante mi periodo de residencia en Microsoft, en el verano de 1989. Había jugado un juego parecido en Mac y, en lugar de estudiar para mis exámenes en la universidad, decidí hacer una versión para PC», relató Cherry en un hilo de Reddit. «Un gerente de programación lo vio y decidió incluirlo en Windows 3.0. Me dejaron muy en claro que no recibiría nada más que una IBM XT para corregir algunos bugs durante mi año de pasantía – y me pareció genial en aquella época, y me sigue pareciendo genial hoy», escribió.

Y por poco el juego no es incluido en Windows. Bill Gates tenía una enorme crítica sobre el juego de cartas: era muy difícil. A final de cuentas Solitario fue lanzado, pero con un objetivo muy diferente al que su creador esperaba; mientras Wes tenía la intención de entretener a los usuarios de PC, Gates quería que el juego estuviera allí para que sirviera como una herramienta que posibilitaba a los usuarios aprender a manipular un extraño dispositivo llamado mouse.

De cualquier forma el juego sufrió alteraciones antes de llegar a las tiendas. Sabiendo sobre el potencial procrastinador de su creación, Wes incluyó una opción que desplegaba una tabla falsa de Excel que aparecía en la pantalla con apenas un clic. La idea era disfrazar el juego mientras el jefe estaba mirando. A Bill Gates no le agradó mucho la idea y quitó la funcionalidad en la versión final. Wes relató esta anécdota en una entrevista al canal de YouTube Great Big History.

Actualmente Wes es dueño de Dragon Head Cider, que está muy lejos de ser una empresa de videojuegos, pues su giro es la fabricación de sidra, la popular bebida hecha a base de manzana. Y no hay nada que indique que pueda regresar a crear juegos de cartas para cualquier tipo de plataforma; pues en esta ocasión si le pagan por lo que hace.

El hecho es que durante varios años, Wes repitió algunas veces la misma broma. «Si hubiera recibido un centavo por cada persona que jugó mi juego, hoy tendría suficiente dinero para salir con Bill Gates». A medida que su historia se fue haciendo conocida, algunas personas llegaron a enviarle un centavo a su cuenta.