Aunque no sea un comportamiento generalizado en la especie, seguramente has visto a un perro deleitándose con un banquete de heces recién expulsadas. ¿Por qué lo hacen? Tal vez llegaste a esta publicación por motivos personales y, aunque te cueste aceptarlo, tu mejor amigo es un comedor de excrementos. A continuación aclararemos algunas (de tantas) dudas que te atormentan sobre el tema, pero lo recomendable es que te prepares mentalmente para los siguientes párrafos.
¡Perro sucio!
A la práctica de ingesta de heces se le conoce como coprofagia, y aunque la intuición pueda sugerir otra cosa no se trata de un comportamiento inusual entre muchos animales.
Un grupo de investigadores de la Universidad de California en Davis, liderados por el médico veterinario Benjamin Hart, llevó a cabo un estudio donde se analizaron los pormenores de la práctica en gran variedad de razas de perro: al principio con animales que comían y no comían heces, y en una segunda etapa exclusivamente con aquellos perros coprófagos.
Aproximadamente 3,000 dueños de perros sirvieron como voluntarios para el estudio, la mayoría residentes de los Estados Unidos y en segundo lugar de Canadá. Mientras los propietarios se dedicaron a observar que los perros ingerían heces de otras especies (pájaros, caballos, cerdos, gatos, vacas, cabras y ovejas), el estudio se enfocó de forma exclusiva en el consumo de heces caninas.
De cada 100 propietarios, 16 informaron haber visto a sus perros comiendo heces en más de 6 ocasiones. Este fue el parámetro de la investigación a través del cual se definió un auténtico “perro comedor de excrementos”. En otras palabras, la mayor parte de los dueños jamás, o raramente, vio a sus perros mostrando este comportamiento, pero como no se trató de un ambiente controlado existe la posibilidad de que los propietarios de los perros coprófagos simplemente no hayan realizado su tarea, por lo que ese 16% podría ser mucho mayor.
Mientras tanto, cuando los investigadores enfocaron un cuestionario exclusivamente en los dueños de aquellos perros comedores de heces, se obtuvieron aproximadamente 1,500 respuestas, donde el 2% de los animales comía excrementos a diario y un 38% lo hacía semanalmente.
¿Qué genera que un perro coma excrementos?
Muchos especialistas apuntan que este comportamiento se debe a que el perro pasa hambre o está desnutrido. Por lo que supuestamente las heces tendrían cierto valor nutricional para el animal.
Pero no necesariamente es así. En el estudio no se pudo establecer una diferencia significativa entre los perros comedores y no comedores de excrementos. Según las conclusiones de los investigadores, la práctica de la coprofagia en perros no está asociada con la edad, el sexo, la castración, la edad de separación de su madre, la facilidad para entrenarlos y otros numerosos comportamientos problemáticos que reportaron los propietarios.
Toda vez que frecuentemente la coprofagia se relaciona con la nutrición de los perros, es importante señalar que en esta investigación la dieta no marcó ninguna diferencia entre los perros comedores y los no comedores de heces. Sin embargo, existe la posibilidad de que las preguntas utilizadas en la investigación no hayan recogido datos suficientes para explorar una relación entre la dieta y el consumo de excrementos.
Finalmente, tampoco se pudo identificar relación alguna entre los comportamientos compulsivos o de ansiedad en animales con la coprofagia, como otros estudios lo habían sugerido previamente. En resumen, resulta complicado especificar con certeza porque un perro come excremento.
Posibles indicadores del comportamiento.
A pesar de estos resultados tan poco alentadores, se logró identificar algunas diferencias sutiles entre comedores y no comedores. Por ejemplo, en aquellas viviendas donde habita más de un perro, es más probable que existan comedores de excrementos, probablemente porque existe una mayor cantidad de heces para ser reaprovechada como comida, o quizá porque la coprofagia atiende a un comportamiento social aprendido.
En algunos perros, la inactividad y el aburrimiento pueden desencadenar dicho comportamiento. Y, ante el entusiasmo que algunos perros experimentan cuando se deleitan con las heces, se hace necesario tomar en cuenta que este comportamiento puede afectar (placentera y positivamente) sentidos como el del olor y el sabor en el animal.
Curiosamente, aquellos perros coprófagos por excelencia eran más propensos a que se les describiera como “comedores codiciosos”, contrario a los “comedores normales o reservados”. Además, un 85% estaba principalmente interesado en el “producto fresco”, en heces no mayores a dos días de edad.
Dicho interés por el excremento fresco, hizo sugerir a los investigadores que “comer excremento” podría ser un comportamiento de adaptación heredado por antepasados salvajes, cuyo objetivo sería eliminar las heces del medio ambiente antes de que las infecciones parasitarias pudieran diseminarse entre la manada. O, quizás, los perros aprendieron este comportamiento a medida que se fueron eliminando sus fuentes de alimento en entornos humanos. Sin embargo, ninguna de las hipótesis resulta conclusiva.
¿Cómo lograr que mi perro deje de comer excrementos?
Ahora, en temas que tienen que ver con el bolsillo: Hart y compañía solicitaron a los propietarios de perros voluntarios que informaran la eficacia de 11 productos comerciales enfocados a detener el comportamiento, y parece que no ayudaron en nada.
Cuando se trata de complementos alimenticios o de comprimidos comercializados para detener la coprofagia en perros, el porcentaje de éxito reportado variaba de 0 a 2%.
Además, los dueños también compartieron sus experiencias respecto a los entrenamientos para modificar el hábito en sus animales. Nada logró que abandonaran su comportamiento. En conclusión, no hay solución, excepto limpiar las deposiciones rápidamente. Es la única forma segura de reducir el comportamiento.
¿Me debería preocupar si mi perro come excrementos?
Aunque lo parezca, la ingesta de excrementos en los perros no representa un gran problema de salud, pero el hábito se ha relacionado a cuadros diarreicos y a la propagación de diversas enfermedades, dependiendo de lo que se consume. Por eso, el comportamiento podría tener bases médicas y entonces deberías consultar a un veterinario si te preocupa tu mascota.
y la bola de idiotas con sus perrhijos que los dejan subirse a sillones, pararse de patas traseras sobre la mesa, dejarlos dormir en las camas y se dejan langüetear la cara… Que asco! Seguro que me van a salir con su típica de «cosas más asquerosas te chupas» y pues sí es cierto
Yo pienso que lo hacen para poblar su estomago con bacterias de otros perros.
Eso al final fortifica sus sistema inmune
Acabo de ver a mi perro haciendolo…no saben como le fue!! Es mejor hacerles ver de una manera energica lo que esta bien,, aunque nos duela pegarles. (La verdad no fue tan duro, unos cuantos periodicazos)
Puedes darle todos los periodicazos que quieras, pero al final resultará completamente inutil. Es como aquellos zoquetes que les pegan a sus perros cada que ladran; No vas a poder evitarlo, es su naturaleza. Al final el que se va a cansar eres solo tú…
Los perros comen caca, lo humanos McDonald’s: Todo bien, todo correcto. (por cierto mi perro si come caca, pero solo la del patio. Cuando lo hace en el jardín no se la come. ¿Porque? yo digo que le faltan un par de tornillos…)