Los experimentos de Hasch

Estamos programados socialmente para conformarnos, el dicho de «¿dónde va Vicente?, donde va la gente» tiene mucho más de cierto de lo que pensamos. Así lo demostró el experimento del elevador de Solomon Asch, una reveladora e histórica prueba que mostró con una claridad ridícula como es que nuestra individualidad como seres sociales se ve totalmente devastada frente a la conducta en multitudes y la forma tan fácil cómo cedemos a la presión social, a pesar de carecer de total lógica. Concluyendo que el comportamiento de masas, al contrario de lo que supondríamos, es totalmente irracional.

conformidad2

En el año de 1962 el psicólogo social Solomon Asch, en conjunto con el programa Candid Camara, demostraron cómo es que el humano promedio se conforma con la norma. La facilidad con la que el humano modifica su conducta para acoplarla a la del grupo hace pensar que se trata de una farsa. Pero eso sólo ocurre porqué observar como la individualidad es diluida resulta cómico y hasta ridículo cuando no estamos en la misma situación.

Experimento de la conformidad.

Por ejemplo, si alguien ve este video en un grupo dónde nadie ríe, es muy probable que tampoco se ria. Tomamos conciencia social al observar desde afuera nuestra conducta dentro del grupo, la realidad colectiva del experimento o la de fuera del experimento es parte de la farsa de la individualidad.

Solomon Asch llevo a cabo una serie de experimentos en los que descubrió el altísimo poder que tiene la presión social sobre nuestra conducta, esos experimentos dieron lugar a lo que se conoce como «el paradigma de conformidad Asch«. En otro experimento se formaron grupos de control con personas que sabían el fin del experimento (infiltrados) y otros grupos de control con personas totalmente ajenas.

A los integrantes se le mostró una tarjeta con una línea seguida de otra tarjeta con tres líneas A, B y C. Luego se les pidió que dijeran cuál de las tres líneas en la segunda tarjeta coincidía con las que se les había mostrado primero. Los participantes «reales» o ajenos a la prueba respondían al final. En la primera fase los que sabían el fin del experimento daban respuestas correctas, las cuales eran obvias. Para la siguiente fase estos mismos personajes infiltrados empezaron a responder equivocadamente.

En el grupo de control integrado solo con personas ajenas al experimento, solo un participante de 35 dio una respuesta incorrecta. El grupo que tenia integrantes infiltrados, 75% de los participantes dieron respuestas incorrectas.

Este interesante experimento muestra que la percepción de la realidad depende de como la ven los demás, a pesar de que sea totalmente ilógica. Es nuestra necesidad de pertenencia creando, a lo largo de nuestra existencia, una imagen del mundo basada en lo que ven los demás, el resultado de una suma colectiva.

Un experimento similar fue llevado a cabo en la Universidad del Sur de Florida con los mismos resultados: una persona en el elevador ante la amenaza de marginarse del grupo actúa conforme a la norma, aunque la conducta que imita sea anormal.

10 comentarios en “Los experimentos de Hasch”

  1. por eso el empeño de inflar candidatoz en «encuestaz» no?? asi la gente individualmente piensa que esa persona ez a quien el colectivo quiere y asi inconcientemente creer que esta bien votar por ese candidato aunque sea totalmente ilogico de acuerdo a lo que noz dice la historia de su partido

  2. Que buen post y que bueno que ya se han dejado de lado los post sobre política, ya que solo llevaban al conflicto en una pagina que va sobre entretenimiento como el encabezado de la misma lo dice.

    Felicidades por lograr dejar de lado algo tan asqueroso y falto de ética como lo es política.

    Mas post como este por favor.

      1. Pues será lo que sea pero es cierto… Entretenimiento, chicas, imágenes, humor, ocio, diversión y mucho más… Si la política está dentro del mucho más y después del ocio quiere decir que no es tan importante como para ponerla en el título, pero últimamente por razones electorales (no tanto por libertad de expresión) le tomaron más importancia a la política (si se le puede llamar política al hablar bien únicamente de un candidato y mal de los demás) de lo normal… y dijera uno obviamente es por la temporada electoral… Pero después del «mega fraude» de 2006 (curiosamente 2 antes del primer post registrado) Hery Emanuel no hizo ningún comentario sobre el asunto… Curioso que en 2006 no haya mostrado interés sobre la política… ¿Será que era menor de edad? ¿Será que no había tenido un despertar político? Sea la razón que sea, tiene todo su derecho de postear o no postear… A final de cuentas si, es su página… Pero si vivió el fraude con internet (obviamente registrado con sus posts) pues…

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *