La complicada historia del fuerte Boyard

El fuerte Boyard es una inusual edificación de roca situada frente a la costa oeste de Francia que alguna vez sirvió como fortaleza. La estructura, completamente separada del continente, parece un castillo flotante entre el vaivén de las aguas que bañan el puerto de Rochefort. La realidad es que los cimientos del fuerte Boyard se aferran a un banco rocoso, que al subir la marea queda bajo la superficie del agua.

Fuerte Boyard en Francia(1)

Fuerte Boyard, una hazaña de la ingeniería.

Contra todo pronóstico, esta hazaña de la ingeniería humana se ha mantenido en este lugar durante un siglo y medio. La historia de este castillo de roca se remonta a finales del siglo XVII, época en que elaboraron los planes para la construcción de un fuerte marítimo que sirviera como escudo a la base militar de Rochefort.

El costo del proyecto resultó muy superior a la estimación inicial, y para 1692 se decidió abandonar la construcción. Incluso los ingenieros de la época criticaron la viabilidad de la empresa. El ingeniero militar francés Sébastien Vauban llegó a decir que “sería más fácil agarrar la Luna con los dientes que terminar el fuerte”.

Durante la Guerra de los Siete Años (1756-63) los franceses intentaron retomar el propósito original de la estructura, pero volvieron a abandonarla. Finalmente, en el año de 1804 se colocaron los primeros cimientos del fuerte Boyard. La hazaña sólo se hizo posible tras verter cientos de toneladas de arena, piedra y escombro al banco natural de roca y arena. Una vez que consiguieron una base firme y plana, iniciaron la construcción del ambicioso fuerte.

un fuerte en medio del mar

Hablamos de un trabajo extremadamente lento y complicado, pues los obreros sólo estaban activos en el corto periodo de tiempo que la marea bajaba y dejaba el banco rocoso al descubierto. A finales de 1807, una serie de poderosas tormentas en el Atlántico dañaron tanto la cimentación del fuerte que los franceses se vieron obligados a detener la construcción por completo.

Fuerte, prisión y set de televisión.

La construcción del fuerte Boyard culminó en 1857. La fortaleza tiene tres pisos que suman 20 metros de altura, donde alguna vez se artillaron 74 cañones. Desde el exterior, el fuerte de piedra maciza parece impenetrable. Además, el formato de óvalo permitía que toda el área circundante donde incursionara algún atrevido enemigo recibiera el cariño de los cañones franceses. El puerto estaba a salvo, pero en el fuerte podían vivir hasta 250 soldados que contaban con viviendas y almacenes.

Desgraciadamente, el fuerte Boyard tardó tanto tiempo en construirse que el desarrollo de cañones de largo alcance neutralizó su utilidad como defensa naval. Durante un breve periodo de tiempo funcionó como prisión, aunque a inicios del siglo XX volvieron a abandonarlo. El tiempo y el clima degradaron la estructura hasta convertirla en ruinas.

Fort Boyard Tv Set
El fuerte restaurado en 1990 – Julie Géant/Phototélé.

En 1990, el productor de televisión francés Jacques Antoine se propuso rescatar la estructura para rodar un programa de juegos llamado Fort Boyard. Eventualmente, el fuerte se convirtió en un set de televisión gracias a una restauración extraordinaria. Actualmente, los franceses consideran que el fuerte Boyard es, valga la redundancia, un baluarte de la defensa de Francia. Esta fama renovada le ha asegurado su existencia, al menos por los próximos años.

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