La infame “guerra contra el narcotráfico” es un rotundo fracaso en México y todo el mundo. Peor aún: en los últimos cincuenta años, todos los esfuerzos para combatir el tráfico de estupefacientes han provocado que la actividad aumente y se diversifique por el mundo, abonando al crecimiento del problema en lugar de solucionarlo. Así lo concluyó un estudio donde se vincula el combate al tráfico de cocaína hacia los Estados Unidos desde Sudamérica con la diversificación en las operaciones de narcotráfico por todo el mundo, lo que las hizo más difíciles de detener.
Causa perdida.
“La investigación revela que las estrategias del combate al narcotráfico por la parte del proveedor por sí solas, en el mejor de los casos, resultan ineficientes y, en el peor escenario, contribuyen al crecimiento de la actividad”, apunta Nicholas Magliocca, geógrafo de la Universidad de Alabama y autor principal del estudio publicado en la revista Proceedings of National Academy of Sciences. En el abordaje empleado para el estudio se modelaron las dinámicas del narcotráfico a nivel local y, simultáneamente, en una red.
“Resulta sorprendente la forma en que este modelo se corresponde con lo que observamos. Nuestro equipo está integrado por investigadores que se desempeñaron en diversas regiones de Centroamérica durante la década del 2000, atestiguando de primera mano el incremento masivo de drogas en la zona, fenómeno que coincidió con el refuerzo al combate de las drogas. Fue cuando nos preguntamos: ¿el combate al narcotráfico [por los Estados Unidos] llevó a los traficantes hasta estos sitios?”, se pregunta David Wrathall, geógrafo de la Universidad Estatal de Oregón y colaborador del estudio.
Para el equipo de investigación, estos hallazgos son extremadamente importantes pues el combate que ha sostenido Estados Unidos contra el narcotráfico durante los últimos cincuenta años no se ha mostrado eficaz o determinante. Y, dada la coyuntura política del continente, ante el incremento en el número de migrantes provenientes de Centroamérica que intenta llegar a los Estados Unidos a causa de la violencia generada por las drogas en sus países de origen, estas conclusiones llegan en un momento importante.
Acción y reacción.
NarcoLogic, el modelo computacional creado por los investigadores, reveló la forma en que los traficantes se adaptan a las estrategias y tácticas de combate contra las drogas recurriendo a una táctica muy simple y efectiva: mudar el área de operaciones. Así, se encontró que la fragmentación y diseminación de las actividades en el narcotráfico están directamente relacionadas a las tácticas y estrategias empleadas hasta hoy. Cuando los esfuerzos del gobierno se enfocan en un sitio, los delincuentes simplemente se van a otro lugar.
“Entre 1996 y 2017, la región de tráfico por el Hemisferio Occidental aumento de 2 a 7 millones de millas cuadradas, provocando que las actividades policiacas para frenar las redes del narcotráfico se vuelvan más difíciles y costosas. Pero, esta expansión del narcotráfico acarreó una serie de daños colaterales relacionados con el contrabando: corrupción, violencia, proliferación de armamento y una acelerada y extensa destrucción del medio ambiente, que ha sido el enfoque de mi trabajo”, especifica Wrathall.
Desde 1971, cuando el gobierno estadounidense presidido por Richard Nixon declaró la guerra a las drogas señalando al consumo de estupefacientes como el “enemigo público número uno”, Estados Unidos ha invertido alrededor de 1 billón de dólares en esfuerzos para prevenir y frenar el ingreso de estas sustancia al país. En esta cantidad podemos incluir casi 5,000 millones de dólares anuales tan sólo en el combate a la cocaína, un desperdicio de recursos que no ha tenido efecto alguno en la oferta o el precio de la sustancia, según los investigadores.
Un cambio necesario.
“En los Estados Unidos, los precios de la cocaína al por mayor se redujeron significativamente a partir de 1980, pero las muertes por sobredosis de esta droga no han dejado de aumentar y las fuerzas de combate logran decomisos a un ritmo cada vez más bajo. En 2015, a Estados Unidos ingresó más cocaína que en cualquier otro año. Algo en común entre los individuos que apoyan la prohibición y aquellos que no es que se necesita un cambio. Este modelo podría ayudar a elegir ese cambio”, dice Wrathall.
La principal hipótesis del estudio, corroborada al comparar las estimaciones de NarcoLogic sobre dónde, cómo y cuándo se traficaron los cargamentos de cocaína entre 2000 y 2014 contra los patrones reales registrados en las bases de datos, es que las operaciones del narcotráfico no se diversificaron y volvieron más resilientes por la ineficiencia del combate a las drogas, sino por el simple hecho de que exista dicho combate.
“Para la observación y la teoría, el estudio es una victoria. Este modelo logró reproducir fielmente la dinámica que nuestro equipo observó. Esto sugiere que cualquier incremento en la prohibición terminará desplazando a los traficantes a nuevas áreas, tejiendo y extendiendo sus redes para seguir transportando sus drogas hacia el norte”, advierte Wrathall.
Guerra sin fin.
Los resultados del estudio son una evidencia más de que la guerra contra el narcotráfico, tal y como la conocemos, es una causa perdida bajo cualquier perspectiva. De hecho, en naciones como Países Bajos y Uruguay (también Estados Unidos) se empezaron a adoptar políticas de legalización, mientras el problema de las drogas es abordado desde una perspectiva de la salud pública.
Sin embargo, otros países (como México) caminan en sentido contrario y siguen atrapados en las mismas prácticas prohibicionistas que se han mostrado ineficientes y contraproducentes durante décadas. El año pasado, el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador presentó la iniciativa Ley General para la Regulación y el Control del Cannabis que pretende regular la producción, distribución y consumo de cannabis en México, misma que habrá de discutirse y aprobarse a mediados de 2019.
Al eliminar la marihuana de la lista de sustancias prohibidas, el gobierno mexicano espera reducir los índices delictivos pues la producción y el tráfico ilegal de la droga dejarían de propiciar el conflicto entre autoridad y mafia, así como entre los propios delincuentes. Mejor aún, con la legalización habrían de recaudarse más impuestos destinados al bienestar social y los campesinos dedicados al cultivo de cannabis, perseguidos durante décadas, serían los principales beneficiados con las licencias para producir la marihuana.
Me parece muy bien, si se cayó en un circulo vicioso (que ironico) en la lucha contra el narco y este cada vez fue haciendo mas corrupto al pais, creo que el buscar alternativas es muy acertado, en los paises mencionados se logran resultados trabajando diferente
El título de este artículo es manipulador. El creer que una sola acción (pelear contra las drogas) aumenta el tráfico de ellas es poco creíble.
El tráfico aumentó porque ahora hay más demanda, y eso porque hay más consumidores, esto porque el producto crea adicción, finalmente porque la manera de evitar la resaca por consumir drogas es seguir consumiendo.
Todo eso tiene un trasfondo: deja mucho dinero.
Te doy un ejemplo: En Estados Unidos hubo algo llamado Ley Seca, que prohibió el alcohol. ¿Has oído hablar sobre Al Capone, el mafioso? Bueno, cuando prohibieron el alcohol, la gente estaba dispuesta a pagar mucho dinero por él, de manera que Al vio ahí un buen negocio e invirtió en la producción de alcohol; este simple acto provocó una oleada de violencia relacionada a esto: Asesinatos, secuestros, corrupción, terrorismo, etc., y además, la demanda de alcohol y la cantidad de gente adicta estaba por las nubes. ¿Cuál fue la solución? Volver a legalizar el alcohol. Cuando el alcohol volvió a ser ilegal y los mafiosos dejaron de sacar ganancia con él, disminuyó la violencia, e incluso el consumo y cantidad de alcohólicos.
Así que ambas cosas están muy relacionadas: La droga deja dinero porque al ser ilegal, es difícil de producir y proveer, lo cual aumenta el precio al que esta se vende, aumenta el afán de los adictos por acaparar todo el producto posible generando así demanda, y por tanto dejando unas bonitas ganancias a quien la produce: Los narcos. Si las drogas fueran legales y pudieras comprarlas de la misma forma que compras un ibuprofeno ¿crees que habría violencia, demanda y que dejaría tanta ganancia como actualmente deja? No.
Ojo, yo apruebo la guerra contra el narcotráfico, pero es muy fácil darse cuenta que entre más difíciles de producir sean las drogas, más demandadas serán y más ganancia dejarán, lo que hay que hacer sería cambiar de táctica por una menos evidente.
Cuando el alcohol volvió a ser legal*
Por lo menos se INTENTO HACER ALGO, no que el actual gobierno al que le lame los esta pagina hasta incentiva el consumo de drogas..
No
Ah caray, ¿Cómo lo incentiva? Ese algo nos dejó con miles de muertos y daños colaterales…
Hery donde se puede ver el estudio? pasa el zelda plis
Está enlazado en el segundo párrafo, en el nombre de la revista. Pero aquí va de nuevo: https://www.pnas.org/content/116/16/7784
Definitivamente cuando se prohíbe algo se vuelve mas atractivo financieramente para el que realizara la cadena de suministro de manera parcial o total, ya que el precio final responderá directamente proporcional a la efectividad del combate y por ende a las ganancias, así es que entre mas disponible el producto en el mercado, el precio de este disminuirá hasta que sea un precio que no genere ganancias atractivas
Es de entender que las ganancias no solo son para el narcotraficante, es para banqueros, comercios y empresas, los mismos políticos, ya las comunidades cercanas al centro de operaciones de la delincuencia, ejemplo claro en Tlahuelilpan.
¿Y Cuál es la alternativa que proponen estos genios? ¿Que los gobiernos se queden de brazos cruzados ante el narcotráfico y todos los males asociados a él (violencia, pandillas, asesinatos secuestros, desplazados, lavado de dinero, adicción, alteración del orden público, trastornos psiquiátricos, muertes)?
Sé que hay quien opina que la lucha contra el narcotráfico es hipócrita y sesgada, pero si ese es el caso, la solución no está en descontinuarla sino en transparentarla. En mi modesta opinión sale más barato hacer más eficiente la lucha contra el narcotráfico que afrontar las funestas consecuencias de una política laissez faire en tal sentido.
Al legalizar al menos una parte de las drogas, permite una mejor regulación de las mismas, lo mismo que pasó con el alcohol y el tiempo que fue declarado ilegal en EUA, donde los traficantes llevaban a cabo otras actividades ilícitas para sustentar el tráfico, mismas que fueron notoriamente minimizadas cuando volvió a ser legal
Esto no le gusta a las focas que le aplaudian a calderon
… y que ahora le aplauden al peje
Lo dice la foca amaestrada de Obrador..
…y hoy en noticias que no sorprenden a nadie…