Un equipo de científicos del Quantum Gravity Research, un instituto de investigación de física teórica con sede en Los Ángeles (Estados Unidos), argumenta que nuestro universo es una “auto-simulación” generada a sí misma a partir del puro pensamiento. La idea de que nuestra realidad es una simulación no es nueva, y en los últimos años el filósofo Nick Bostrom ha retomado la idea de que existimos gracias a complejas simulaciones computacionales: procesos generados por seres tan tecnológicamente avanzados que jamás podremos conocer.
La idea de que la realidad es una simulación.
El estudio publicado recientemente en la revista Entropy parte de la idea de Bostrom y la lleva a un nuevo nivel: ¿y si en lugar de depender de seres avanzados responsables de crear la tecnología necesaria para simular todo lo que existe, no sería más eficiente una propuesta en que el propio universo es una “auto-simulación mental”?
La principal diferencia entre esta teoría y la hipótesis original de Bostrom reside en el materialismo. Una considera que la naturaleza del universo es inherentemente física. Incluso nuestro proceso evolutivo sería un mecanismo a través del que seres futuros prueban incontables procesos, desplazando a los humanos a través de diversos niveles de crecimiento biológico y tecnológico, generando en el camino la supuesta información que relata la historia de nuestro mundo.
Principio de lenguaje eficiente.
Pero, la propuesta más reciente no recurre al abordaje materialista: aquí todo cuanto existe es información expresada mediante el pensamiento. De esta forma, el universo tendría capacidad de “actualizar” su existencia solo, apenas recurriendo a algoritmos subyacentes y una regla que han denominado “principio de lenguaje eficiente”.
“Mientras muchos científicos suponen y presumen que el materialismo es verdadero, consideramos que la mecánica cuántica puede proporcionar pistas de que nuestra realidad es una construcción mental. Los últimos avances en materia de gravedad cuántica, como observar el espacio-tiempo emergiendo a través de un holograma, también sugieren que el espacio-tiempo no es fundamental, un aspecto compatible con el hermetismo filosófico y la filosofía india. De cierta forma, la construcción mental de esta realidad fabrica el espacio-tiempo para entenderse con eficiencia, generando una red de entidades subconscientes que pueden interactuar y explorar la totalidad de las posibilidades”, explica el físico David Chester.
El gran pensamiento.
Pero, si todo nuestro mundo es una simulación o simplemente un “gran pensamiento”, ¿cómo se originó? Para explicarlo, la nueva teoría recurre al término “emergentismo atemporal”, sugiriendo que siempre existió. En esta idea se supone que el tiempo no existe. De hecho, este pensamiento único e integral que origina nuestro mundo tendría una estructura jerárquica, repleta de “sub-pensamientos” más pequeños que se desdoblan hasta llegar a las matemáticas básicas y partículas fundamentales.
El principio del lenguaje eficiente sugiere que los humanos no son otra cosa que “sub-pensamientos emergentes” que experimentan el mundo y encuentran un significado en él recurriendo a otros sub-pensamientos.
Todos estos conceptos están fuertemente relacionados con algo llamado “pampsiquismo” (o panpsiquismo), donde todo es visto como pensamiento o consciencia. Este modelo “panpsiquico auto-simulado” explicaría el origen de una panconsciencia integral que “se autorrealiza en un extraño bucle”. Esta panconsciencia tendría libre albedrío y sus diversos niveles la capacidad de seleccionar que código emplear al elegir la sintaxis.
Y el objetivo de esta conciencia no sería otro que generar significado o información.
Analogía con los sueños.
Todos los conceptos cuánticos y filosóficos que acabamos de desglosar resultan difíciles de comprender. Por eso, para facilitar el entendimiento los investigadores sugieren que pensemos en nuestros sueños como nuestras propias auto-simulaciones.
Si los comparamos con inteligencias artificiales muy elaboradas, nuestros sueños serían algo primitivo. Sin embargo, funcionan muy bien como ejemplo de la evolución del pensamiento. Los investigadores mencionan que la resolución extremadamente fiel de estas simulaciones y la precisión de la física son notables.
Los sueños lúcidos, en los que el individuo está consciente de estar dentro de un sueño, son los mejores ejemplos de estas simulaciones extremadamente precisas generadas por la mente, imposibles de distinguir de cualquier otra realidad.
Los investigadores consideran que, en el futuro, los avances en la edición genética permitirán a las personas fabricar conciencias para hacer nuestras simulaciones mentales más poderosas. Y, algún día, existirán mentes que ni siquiera requieran de materia.
Perspectiva distinta.
Si comparamos estas afirmaciones con los estándares que normalmente observamos en el ámbito científico, parecen un disparate. Sin embargo, el personal de Quantum Gravity Research considera que tienen la obligación de pensar críticamente sobre la conciencia y ciertos aspectos de la filosofía que pueden resultar incómodos para algunos científicos.
La vida, no es más que un conjunto de imágenes guardadas en nuestro cerebro, y todo nuestra realidad es la proyección de algo uicho más grande, producido por fuentes de luz que crean dimensionalidad al al cruzarce las mismas
Compañero, este tipo de hipótesis ya se han sucitado desde la antigüedad. Jugar con lo «percibido» es caer en subjetivismos que lo único que han logrado cuando surgen, es confundir a la gente. Conceptos relativos como este, ya han sido rebatidos y superados con anterioridad, y si bien es cierto, que con las herramientas que disponemos actualmente es posible lograr una demostración, o en su defecto, la refutación de dicha hipótesis, aludir a la fenomenología del hombre, solo por posibles interpretaciones subjetivas, realmente no proporciona respuestas.
Tampoco se trata de definir tajantemente esta realidad como un todo meramente real y objetificada, sin embargo, irse al otro extremo, sería caer en un idealismo extremadamente radical.
Entiendo su punto de brindar una oportunidad para la experimentación de dicha hipótesis. Al final de cuentas, así se logra el conocimiento auténtico. Sin embargo, considero que, antes de elaborar una hipótesis como la expuesta, sería pertinente revisar dónde estamos parados.
*suspiro*
La Filosofía siempre ha luchado por demostrarle la realidad al hombre. Y cada vez que las personas caen en estos solipsismos y sofismas, se retrocede en el avance de la humanidad.
Hagamos un esfuerzo verdadero por avanzar, y no caer en este tipo de falacias, que lo único que logran es nublar la mente.
Yo no creo que sea una falacia, hasta que se demuestre epistemológicamente que lo es. A fin de cuentas se trata de una teoría que busca dar explicación a la existencia y a la búsqueda, como lo menciona el propio texto, de significado y de información. Yo lo percibo como una interpretación del ‘Principio del Mentalismo’ y también del concepto de ‘Solipsismo’ que tú mencionas.
Muy buen artículo para poner a trabajar las neuronas.
Mama Lon
Buena la imagen de TOOL