El gusano de sangre (Glycera dibranchiata) posee una inusual característica en sus dientes. Además de proteína y melanina, los colmillos de este poliqueto contienen cobre. Una composición por demás inusual en el reino animal. Ahora, una investigación reveló el mecanismo mediante el que recogen cobre de sedimentos marinos para formar sus dientes.
Develando el misterio en los dientes del gusano de sangre.
Publicada el pasado 25 de abril en Matter, la investigación estuvo a cargo de Herbert Waite, bioquímico de la Universidad de California. Waite lleva más de dos décadas estudiando a estos animales. Sin embargo, hasta hace poco logró observar todo el proceso químico que da origen a los colmillos de los gusanos.
En los gusanos de sangre los dientes aparecen una sola vez en la vida, por lo que deben tener fuerza y resistencia suficientes para durar los cinco años de vida del animal. La dieta de estos gusanos consiste principalmente de pequeños bichos a los que atrapan con sus dientes. Sin embargo, también cazan especies con exoesqueleto.
La dureza de los colmillos les permite perforar la armadura e inyectar un veneno paralizante a sus víctimas.
Gusanos problemáticos.
Waite dice que los gusanos de sangre son animales sumamente desagradables. Sobre todo, porque reaccionan violentamente a la más mínima provocación. “Cuando se topan a otro gusano, generalmente, luchan empleando sus colmillos de cobre como arma”.
El proceso de formación de los temibles dientes empieza con un precursor de proteína que recolecta cobre y lo transforma en un líquido viscoso. Después, la proteína emplea ese cobre en la generación de melanina, un polímero que le otorga al diente algunas características mecánicas que evocan a los metales.
A través de un proceso tan “simple”, estos animales logran sintetizar el material. Para replicar algo así en un laboratorio tendrían que emplear multitud de aparatos en un complicado proceso con solventes y variaciones de temperatura. “Jamás esperamos que una proteína con una composición tan simple, es glicina y histidina, desempeñara funciones tan extrañas”, señala Waite.
Ahora, el equipo tras la investigación buscará la forma de utilizar el mecanismo del gusano de sangre en la optimización de formas de producción que beneficien a la industria. “Estos materiales podrían orientarnos al diseño y producción de mejores materiales de consumo”, agrega Waite.
De mi no van a estar hablando así