Boston y la explosión de melaza en 1919

El 15 de enero de 1919 transcurría como cualquier otro día. Y pocos imaginaban que una explosión de melaza marcaría la fecha como una tragedia en la historia de Boston, Massachusetts. En la Purity Distilling Company, ubicada sobre la 529 Commercial Street, un gigantesco contenedor de melaza de 18 metros de largo comenzó a moverse y producir un sonido espeluznante. Aquella tragedia empezó con un gruñido fuerte, seguido por un ruido similar al de una ametralladora, como si los remaches del tanque cedieran uno a uno bajo la enorme presión.

Boston explosion de melaza en 1919

Explosión de melaza en Boston.

La explosión resultó monumental, y el tanque finalmente cedió, matando a muchas personas y devastando las instalaciones de la empresa. La melaza, que por aquel entonces se empleaba en la producción de cordita, edulcorantes y licor, se desprendió del tanque y se abrió paso a través del vecindario de North End. Aquel río altamente viscoso compuesto por 9.5 millones de litros de melaza rodeó carretas, volcó automóviles y sepultó caballos. La ciudad se paralizó cuando el jarabe marrón oscuro alcanzó una altura de casi un metro y comenzó a circular por las calles.

La gente se vio atrapada entre los residuos, luchando por obtener aire y mantenerse con vida. Los individuos que transitaban por el vecindario fueron atropellados por un espeso y asfixiante lodo que los envolvió en su flujo. Personas de todas partes se esforzaron por asistir a las víctimas, pero la masa de melaza se mostró impenetrable. En cuestión de minutos varias cuadras de este barrio en Boston se habían transformado en el escenario de edificios en ruinas y personas que luchaban por no morir enterradas entre los restos de este dulce espeso que alcanzaba casi el metro de altura.

Operación de rescate.

Las acciones de rescate iniciaron de inmediato, pero muchos actuaron sin saber que rápidamente quedarían envueltos en el caos y que quienes necesitarían ayuda eran ellos mismos. Los aterrorizados sobrevivientes eran vistos corriendo por las calles cubiertos por residuos de melaza color marrón oscuro. Un navío cañonero llamado USS Nantucket se encontraba anclado en el Playground Pier a tan solo unas cuadras de la zona del desastre.

Por lo que el comandante HJ Copeland ordenó a gran parte de sus hombres prestar asistencia a la comunidad. Policías, militares y enfermeros de la Cruz Roja se abrieron paso entre este jarabe mortal buscando víctimas pegajosas la noche entera.

Boston y la explosion de melaza en 1919

El catastrófico resultado de la explosión de melaza.

El evento dejó una estela de muertos y heridos. Se reportaron 21 pérdidas humanas, principalmente por aplastamiento y asfixia, mientras que 150 personas resultaron con lesiones. La responsabilidad por el desastre inicialmente se atribuyó a un grupo de anarquistas saboteadores, pero nunca se determinó el motivo exacto. Hoy, se cree que la presión excesiva y defectos de fabricación en el tanque fueron los causantes de la explosión.

La Purity Distilling Company pagó una indemnización de un millón de dólares a los afectados. El puerto local se tiñó de marrón durante todo el invierno y la primavera que precedieron al evento, pues requirieron de más de seis meses para limpiar los edificios, automóviles y calles envueltas en la pegajosa sustancia. La catástrofe del tanque de melaza también coincidió con la ratificación de la decimoctava enmienda a la Constitución de los Estados Unidos, lo que abrió el camino a la Prohibición.

El tanque de melaza funcionó sin problemas hasta ese día, aunque semanas antes empezaron a correr rumores sobre problemas de seguridad en la empresa. Decían que la Purity Distilling Company había pasado por alto la prueba de presión en el contenedor antes de utilizarlo por primera vez. Y que, desde la primera carga con melaza, el tanque empezó a fugar en varios puntos. En lugar de reparar los defectos, la empresa prefirió pintar el tanque de marrón. Aquel trágico día de 1919 la presión al interior del contenedor se incrementó como nunca antes debido a la fermentación del producto y las temperaturas particularmente elevadas de la época, lo que provocó una ruptura irremediable.

Una decisión que le costó la vida a muchos y causó daños irreparables en la zona. Aunque ya pasó más de un siglo desde la inundación, en días calurosos la melaza sigue brotando en algunas zonas de la ciudad.

Los responsables.

La investigación sobre el origen de la explosión del tanque de melaza se prolongó durante meses e involucró a expertos en ingeniería y seguridad. Después del desastre, la Purity Distilling Company atravesó una serie de investigaciones y sanciones. La empresa se vio obligada a endurecer la normativa para garantizar que la seguridad en el trabajo fuera prioridad. La explosión también tuvo un impacto significativo en la atención médica del área. Los médicos y enfermeros de la Cruz Roja respondieron con rapidez y profesionalismo, pero el daño ya estaba hecho.

La explosión del tanque de melaza en Boston marcó un punto de inflexión en la historia de la industria del procesamiento de alimentos. La catástrofe llevó a una serie de cambios en la normativa y en las prácticas de seguridad en la industria. La restricción de la fuente de la melaza y la implementación de sistemas de seguridad más rigurosos se convirtieron en prioridades para las empresas del sector.

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