Encontrar a la persona ideal para compartir el resto de la vida es un sueño que a muchos nos gustaría cumplir. Pero, por otra parte, permanecer en una relación que ya no tiene sentido es experimentar el infierno en la Tierra.
Típicamente, el terror suele nacer a través del sentido de la visión y se ve complementado por el sonido. Sin embargo, el audio puro también es capaz de generar estados de profundo miedo. Hoy te presentamos una compilación de sonidos aterradores que circulan por Internet.
La hipotética existencia de un ser supremo es la base de todas las religiones alrededor del mundo. Sin embargo, ¿alguna vez te has preguntado qué sucedería en nuestra vida colectiva de confirmarse la existencia de Dios? En primer lugar, los humanos creerían que se trata del fin de todos los problemas, pero dicha expectativa cambiaría sumamente rápido.
Imagina que tienes un barco terminado hecho completamente de madera. Cierto día cambias una de las tablas por otra, de aluminio. El barco sigue siendo el mismo; sin embargo, ahora tiene un trozo de aluminio.
Ayer por la noche colocaba una pieza para imprimir como de costumbre, simplemente dejo que la impresora haga su trabajo después de la tercera capa. Tomo esta medida de precaución pues, generalmente, las boquillas de extrusión son muy estrechas, y no es nada raro que los cabezales de la impresora se tapen, pues la primera capa es contra la cama, para que la pieza se adhiera y no se mueva mientras va siendo creada, línea por línea y capa por capa por la máquina. La tercera capa es una señal de que la impresora funciona bien, así que me puedo ir a dormir y dejarla trabajando sola.
Un extraño en un lugar extraño. Ese es el sentimiento que predomina en la mayoría de personas que van a vivir a Japón. Aunque pasen años mezclándose en la cultura nipona, el estigma del gaijin (término del idioma japonés reservado para referirse a un extranjero) jamás los abandona. Japón tiene una cultura muy diferenciada, incluso entre los países asiáticos, y el choque cultural se vuelve algo constante para la mayoría de los inmigrantes, al grado de poder manifestarse como una especie de sensación opresora.