5 Animales siniestros totalmente inofensivos

En la naturaleza siempre prevalece esa máxima de que “las apariencias engañan”. No es raro que animales pequeños y de apariencia sumamente delicada contengan potentes venenos en cantidades suficientes como para matar a varias personas. Por otra parte, existen especies corpulentas con una alta concentración de masa muscular que resultan dóciles e inofensivas.

Hoy veremos una compilación con algunos de los animales más atemorizantes del mundo, pero que representan poca o ninguna amenaza para los seres humanos.

1 – “Madre de alacrán”.

Estos insectos, conocidos en algunas regiones de México como “madres de alacrán”, parecieran tener lo peor de las arañas y los escorpiones. Y algo hay de eso, ya que los amblipígidos (Amblypygi) son arácnidos pertenecientes a la misma clase que las arañas, escorpiones y garrapatas. Su cuerpo ancho, patas delgadas y ojos pequeños lo dotan de un aspecto un tanto repugnante, pero son animales totalmente inofensivos.

“Los amblipigios carecen de glándulas venenosas y muchas de las especies son dóciles”, dice la bióloga de la Universidad de Nebraska-Lincoln, Eileen Hebets, especialista en la investigación de amblipígidos. “Por lo general, colecto animales que están fijos a los trocos de los árboles tomándolos con dos dedos y, a continuación, metiendo el pulgar bajo sus cuerpos para despegarlos de la corteza. Pese a este abordaje tan intrusivo, jamás sufrí intento alguno de ataque por parte de la especie”, finaliza la investigadora.

En México contamos con aproximadamente 20 especies catalogadas, cinco de las cuales son endémicas de la región y se concentran en los estados del sudeste (Quintana Roo, Chiapas y Oaxaca). Estos insectos son comunes en los bosques tropicales y subtropicales. Sin embargo, los “tendarapos” tienen una excelente disposición a adaptarse, así es posible encontrarlos en ambientes áridos, como los desiertos, e incluso en el interior de las cavernas.

Un dato curioso sobre este animal es que apareció en “Harry Potter y el cáliz de fuego” – el cuarto título de la saga –, probablemente elegido por su apariencia tan exótica. En una de las escenas el profesor Alastor Moody muestra un amblipígido durante su clase de brujería. En uno de sus comentarios afirma que “si te llega a picar… es letal”. Al menos son letales en la fantasía, pues ya aprendimos que no representan ningún peligro para los humanos.

2 – Lampreas.

Lamprea es un término comúnmente empleado para referirse a varias especies de peces originarias de aguas dulces. Pertenecientes a la familia Petromyzontidae, suelen habitar en las pesadillas de muchos debido a que poseen bocas con forma de ventosas tapizadas de líneas circulares de “dientes”.

Aunque tengan una apariencia aterradora, las lampreas representan un “riesgo mínimo para las personas”. Así lo afirma un investigador del Servicio Geológico de los Estados Unidos, Joseph Zydlewski. “La lamprea tendría que permanecer un buen tiempo aferrada a nuestro cuerpo para poder perforar la piel y alimentarse – y nosotros tenemos manos. Jamás permitiríamos una lamprea pegada el tiempo suficiente para lograr eso”, complementa el experto.

3 – Tiburón duende.

Resulta imposible negar que su enorme nariz en forma de cuchillo, sus cinco metros de envergadura y sus prominentes mandíbulas repletas de dientes filosos proporcionan al Mitsukurina owstoni una apariencia alucinante. Sin embargo, un ecologista llamado Chip Cotton de la Universidad Estatal de la Florida, dice que la probabilidad de que un tiburón duende ataque a un ser humano es sumamente baja.

“Habitan en el fondo oceánico, a más de 200 metros de profundidad, donde encontrar a una persona es algo sumamente difícil”, puntualiza el experto. Y varios otros registros realizados en los océanos Pacífico, Índico y Atlántico sugieren que esta especie suele ir mucho más profundo, a aproximadamente 1,200 metros.

“Existen registros raros en los que aparecen en aguas más superficiales, pero se trataba de animales enfermos o que estaban agonizando. Su estado estaba dan debilitado que apenas podían nadar, imposible que tuvieran la capacidad de atacar a un humano”, agrega Cotton. El tiburón duende se considera uno de los tiburones más antiguos que habitan el planeta, suele alimentarse de calamares, pulpos, camarones y otros moluscos.

Ejemplares de esta especie han sido capturados en el Golfo de México. El primero del que se tiene registro fue en el año 2000, y más recientemente, en mayo de 2014, un pescador de la Florida capturó uno en Cayo Hueso. Son los únicos dos eventos registrados en la zona.

4 – Murciélago orejón de Townsend.

El Corynorhinus townsendii es una especie de murciélago comúnmente encontrada en Norteamérica. Aunque tenga una cara horrenda y haga unas muecas aterradoras, “estos murciélagos jamás atacarían a un ser humano, pues no existe razón para que lo hagan”, afirma Micaela Jemison, una ecologista de un blog titulado The Inverted Perspective.

“Se aproximarían a los seres humanos en caso de que estuvieran cazando insectos. Por ejemplo, insectos que estuvieran cerca de linternas o cámaras. Los murciélagos tienen un papel importante en el control de insectos, como los mosquitos y las plagas agrícolas. Son una parte importante de nuestro medio ambiente”, agrega.

5 – Cangrejo de los cocoteros.

Resulta imposible no sentirse incómodo ante un cangrejo de los cocoteros (Birgus latro), un animal muy común en las islas tropicales de los océanos Pacífico e Indico que tiene una dieta vegetal, entre la que incluye a los cocos. Es el artrópodo terrestre más grande del mundo, pudiendo alcanzar hasta un metro de punta a punta y pesar más de 4 kg.

Aunque monstruosos, el investigador Jakob Krieger de la Universidad de Greifswald, garantiza que “no son agresivos” y que son “animales comparables en lentitud con las tortugas”. Otro aspecto interesante de la especie es su longevidad: un cangrejo de estos puede vivir alrededor de un siglo.

El único cuidado que debe tenerse con uno de estos animales es evitar el contacto, y es que si sus tenazas tienen fuerza suficiente como para abrir cocos, ya podrías imaginarte lo que le harían a una mano. Por eso, si llegas a encontrarte con uno de estos crustáceos, no intentes tocarlo o sostenerlo.

Evidentemente, estos son solo algunos ejemplos de animales siniestros que no representan grandes riesgos para los humanos. Si quieres ver animales extremos y peligrosos, siempre puedes voltear a ver a Australia y su naturaleza exótica.