Los gatos son animales sumamente impredecibles. Tampoco es que esto sea malo, pues para los dueños de gatos es uno de los aspectos que más amamos de ellos. Todos esos pequeños matices en su personalidad los convierten en mascotas únicas. Y hay tantas cosas sobre los michis que sólo aquellos que conviven con uno pueden entenderlo.
Compartir la vida con uno de estos peludos es una aventura increíble, repleta de momentos hilarantes y episodios de mucha alegría. Pero, tener a un pequeño ser curioso deambulando por toda la casa a veces resulta inconveniente. Ningún mueble se salva de sus garras, y cuando se trata de candelabros o vasos: no mercy.
Además, si te has enamorado lo suficiente y decides comprarle un regalo. Lo mejor es que te prepares para que lo ignoren y jueguen con la caja o empaque vacío. Si tienes un gato, te identificarás plenamente con esta compilación de imágenes.
Cualquier clase de harapo, trapeador o prenda sucia resulta infinitamente más cómodo que una cama.
Un gato siempre te ayudará a deshacerte de cosas innecesarias.
Aunque a veces son ellos los que necesitan ayuda urgente.
Esencialmente, les importa medio comino cualquier cosa que resulte importante para ti.
Aunque, si estás en problemas créeme que te ayudarán… muy a su estilo.
No tienen la más mínima idea de lo que significa «espacio personal».
Le compres lo que le compres, siempre terminarán eligiendo la caja de cartón.
Frecuentemente ignoran las consecuencias de sus acciones. O quizás sí lo saben, pero simplemente no les importa.
Cuando intentes cocinar algo, buscarán involucrarse en el proceso.
Jamás toques a un gato ajeno. Y si lo haces, prepárate para lo peor.
Evita, en la medida de lo posible, adquirir artículos que sean muy brillantes.
Siempre que te incomoden de alguna forma, pretenderán que no saben lo que están haciendo.
Cada uno de los espacios de tu casa se convierte automáticamente en territorio del gato.
Jamás perderán la oportunidad de intentar asfixiarte.
