A la tierna edad de 5 años, la estadounidense Amber Rachdi ya pesaba 70 kg. Desgraciadamente, su peso siguió aumentando desmesuradamente conforme crecía. La obesidad que padecía se volvió tan grave que la mujer ya no podía estar más de media hora de pie. Además, los médicos le advirtieron que si no perdía peso podría estar muerta antes de cumplir 30 años.
La mala alimentación de Amber la llevó a pesar 315 kg. Los atracones de comida la sumieron en una vorágine de autodestrucción donde sentía que no tenía futuro. Le parecía imposible cambiar su cuerpo a través de la fuerza de voluntad.
“Me duele todo. Estoy completamente limitada sobre lo que puedo hacer y a dónde puedo ir. Me siento atrapada. Soy una persona miserable. No me gusta ser quién soy. Siento pena de mí misma por tener este tamaño. En ocasiones, la desesperanza es tanta que siento que no vale la pena seguir viviendo. O qué tal vez lo mejor era nunca haber nacido”, confesó Amber en una entrevista al Daily Mail.
El radical cambio de Amber Rachdi.
Afortunadamente, el futuro le tenía cosas buenas preparadas. En 2014, tras una cirugía bariátrica perdió más de 127 kg. Este procedimiento no solo salvó su vida, sino que la puso en el camino a una existencia más saludable. Evidentemente, este cambio jamás hubiera sido posible sin la asistencia psicológica de un profesional.
Actualmente, Amber Rachdi vive en Houston, Texas, en compañía de su familia. Hoy, reconoce que sus atracones de comida buscaban mitigar los sentimientos de ansiedad y lidiar con el miedo al fracaso. Además de los cambios radicales en su alimentación, Amber se ejercita regularmente en un gimnasio.
Y todavía sigue con terapia psicológica, pues la considera un aspecto importante para controlar la ansiedad, así como para entender mejor los mecanismos con que su cerebro enfrenta los problemas. Con una figura completamente nueva, Amber Rachdi se animó a abrir una cuenta en Instagram.
En esta red social, donde se define como una “gorda normal”, comparte su nuevo estilo de vida. “Jamás seré esbelta, pero ya hice las paces con eso”, señaló. Actualmente, más de 250 mil personas siguen la historia de vida de esta mujer que superó una obesidad extrema.