Revolución en la apicultura: sacar miel de la colmena con un grifo

Un invento de origen australiano para la extracción de miel causa furor en un sitio de financiamiento colectivo y promete revolucionar la apicultura.

Un par de apicultores australianos llamados Stuart y Cedar Anderson inventaron el Flow Hive, un grifo para una colmena que extrae la miel a través de una estructura concebida para causar el mínimo de perturbación a las abejas reduciendo drásticamente el trabajo de recolección. Desarrollaron esta invención desde hace una década y en los últimos tres años fueron al campo a probar su proyecto.

Una de las grandes dificultades al realizar la recolección es obtener miel sin matar o herir a las abejas. La fumigación, un proceso empleado desde hace mucho tiempo, debe hacerse con pericia para no quemar o herir a los insectos. Al usar humo en la manipulación, las abejas creen que están en medio de un incendio y llenan el contenedor de miel. Cargadas del precioso líquido para garantizar la supervivencia, se vuelven menos agresivas. Es necesario elegir bien el material usado para producir el humo y debe aplicarse al mínimo posible. Incluso ejecutado por hábiles apicultores, es un proceso estresante para la colmena.

Con el Flow Hive cualquiera puede extraer miel, con poca o ninguna perturbación para las abejas. Basta girar la llave y drenar la dulce bebida al exterior de las colmenas. Menos trabajo para el apicultor y más tranquilidad para las abejas.

Cómo funciona.

El secreto está en los cuadros plásticos flexibles, durables (y libres de BPA). La estructura de flujo consiste en células de nido de abeja, ya formados. Las abejas complementan el panel con su cera, rellenando las células con miel y taponándolas, como lo hacen de forma natural.

Cuando se gira la herramienta, un poco parecido a girar un grifo de agua, las células se dividen verticalmente dentro del panal formando canales, permitiendo que la miel fluya a una caja sellada en la base del cuadro y siguiendo hacia el exterior de la colmena, mientras las abejas prácticamente permanecen intactas en la superficie del panal.

Al cerrar el drenaje de la miel, la configuración vuelve a la posición original. Permitiendo que las abejas rellenen las células con miel nuevamente.

Cada cuadro Flow Hive se desarrolla con un final transparente único que permite ver al interior de la colmena. Esto significa que es posible ver dentro de la colmena transformando el néctar en miel y viendo cuando cada panal se completa o monitoreando si hay algún problema al interior.

Mediante una campaña en Indiegogo, un conocido sitio de financiamiento colectivo, los inventores esperan inspirar a una nueva generación de apicultores a colectar miel de una forma más sencilla, más gratificante, más benigna con el medio ambiente y menos nociva para los insectos.