Niños médium: el caso de las hermanas Fox

El relato de las hermanas Fox supone el primer registro moderno de mediumnismo. En el año de 1847, la familia se mudó a una choza en la localidad de Hydesville, en aquel entonces un pequeño poblado del estado de Nueva York. A los pocos días de instalarse, los integrantes de la familia empezaron a escuchar ruidos de rasguños en las paredes y en el suelo y, poco después, de pasos y muebles siendo movidos. Debido al miedo, las niñas Kate (1837-1892) y Maggie (1833-1893) empezaron a dormir con sus padres.

Por inverosímil que parezca, las niñas intentaron comunicarse con el “fantasma”. Kate incluso lo desafió, solicitando que repitiera el número de golpes que ella daba. Para sorpresa de todos, se escuchó el mismo número de palmadas. Su madre, Margareth, pasó a hacer todo tipo de preguntas y propuso que la entidad respondiera con una “palmada” cuando quisiera responder “no” y dos cuando la respuesta fuera “sí”.

Combinando las palmadas y el alfabeto, Margareth y sus hijas resolvieron el misterio: se trataba del espíritu de Charles B. Rosma, un vendedor ambulante que había sido asesinado de una puñalada en el pecho en una de las habitaciones. La historia se divulgó por el pueblo y los residentes descubrieron restos de carbón, cal, cabello y fragmentos óseos sepultados en el sótano.

Las hermanas fueron alejadas de la casa, pues se sospechaba que el fenómeno estaba relacionado con su presencia. Kate fue a vivir con una hermana, Leah, y Maggie con su hermano David. Pero las palmadas se fueron con ellas. El cadáver de Charles fue descubierto 56 años después, en 1904, oculto en una pared falsa, cuando un grupo de niños entró a jugar en la “casa embrujada”.

En la adolescencia, las hermanas se dedicaron a ofrecer sesiones públicas de mediumnismo. Kate siguió con el oficio durante la adultez. Para librarse del control de Leah, que actuaba como su “representante”, Maggie y Kate llegaron a asegurar que el caso de Hydesville había sido un fraude. Sin embargo, después, Maggie reculó y confirmó que el fenómeno había sido autentico.