Esta es otra historia inspiradora que nos recuerda que todo es posible cuando hay un sueño de por medio. Dylan Siegel, de 6 años, no podía quedarse de brazos cruzados a sabiendas de que su mejor amigo, Jonah Pournazarian, de 7 años de edad, había estado luchando contra una enfermedad rara y grave para la que no hay cura conocida.
Jonás fue diagnosticado glicogenosis, una enfermedad incurable que afecta el almacenamiento del glucógeno, haciendo que el nivel de azúcar en su sangre caiga con frecuencia. Fue entonces que Dylan decidió ayudar a recaudar dinero para la investigación de la enfermedad, con el fin de que su amigo tuviera una oportunidad.
El padre de Dylan sugirió que hiciera un puesto de limonada, pero Dylan tenía una mejor idea, quería escribir un libro. Así nació «Chocolate Bar«, una obra de 16 páginas escritas y dibujadas a mano, que viene con barras de chocolate. El libro salió a la venta en la feria de libro de su escuela, pero se corrió la voz, y mucha gente quería comprarlo, provocando que más ediciones tuvieran que ser producidas. La noticia se difundió por todo el mundo y «Chocolate Bar» ya ha logrado recaudar $ 200,000 dólares. La cantidad fue donada íntegramente a los centros de investigación capaces de entender mejor esta enfermedad rara, para luego, encontrar una cura o tratamiento para ella.
Pero Dylan no quiere para alló – su objetivo ahora es conseguir la cantidad de un millón de dólares. ¿Alguien lo duda?
Desde ahora mis amigos tambièn son «Dylanes» son sinónimos. ♥
Buena onda del morrillo, hay esperanza para la humanidad
Fe en la humanidad, restaurada.
Aqui esta la pagina.
Yo voy a mandar pedir el libro y una playera
http://chocolatebarbook.com/
Es por eso que nunca se debe subestimar a los niño. Ellos tienen una forma de ver al mundo que si lo adultos la conservaramos, el mundo seria un lugar diferente. Me cae mal que algunos padres que llevan a sus hijos por las calles los ignoran cuando estos les platica o preguntan algo, prefieren estar con el celular escribiendo estupideces en las redes sociales.
Uuuhhhh!!! Burnnnnnnn!!!
Definitivamente yo lo compraría, no es por el libro en si, es por la calidad humana del niño