En el corazón del vasto desierto de Guiza se yergue una de las maravillas más perdurables y misteriosas de la antigüedad: la Gran Esfinge. Esta monumental escultura, que ha desafiado el tiempo y las teorías históricas convencionales, también protagonizó las enigmáticas visiones de Edgar Cayce. Este médium estadounidense, apodado “el profeta durmiente”, despertó la curiosidad del mundo con sus habilidades psíquicas.
Edgar Cayce y el Salón de los Registros en la esfinge de Guiza.
Cualidades que le permitieron diagnosticar enfermedades a distancia y desvelar conocimientos profundos sobre civilizaciones antiguas en estado de trance. El impacto de Cayce en la esfinge de Guiza es innegable. Durante uno de sus trances, conectó esta antigua estructura a una cronología que ubica su construcción miles de años antes de lo aceptado por la cronología egipcia tradicional. Cayce situó el origen de la Esfinge y las pirámides alrededor del 10490 a.C., mucho antes de la cronología establecida de Egipto.
Lectura recomendada: Hy-Brasil, la isla perdida
Esta hipótesis no solo arroja dudas sobre la historia reconocida de estas estructuras icónicas, sino que las conecta con la civilización de Atlantis. Aunque algunos desestiman a Atlantis como un mito, las visiones de Cayce sugirieron que había una era dorada de Egipto que servía de puente entre las dos civilizaciones. Dentro de la esfera de influencia de Cayce se encuentra la profecía de una cámara oculta bajo la pata derecha de la Esfinge, que él llamó el «Salón de los Registros«.
En este espacio, Cayce visionó una colección de sabiduría ancestral, la cual prometía pistas revolucionarias sobre Atlántida y la historia de la humanidad. Esta imagen de un depositario de conocimiento, comparable a una Internet de la antigüedad, ha cautivado a individuos del mundo entero.
Investigación.
En 1978, la Edgar Cayce Foundation lanzó la Sphinx Exploration Project, una iniciativa que buscaba verificar las profecías del médium utilizando tecnología de perforación avanzada. Este equipo encontró anomalías que sugerían la existencia de cámaras ocultas en las pirámides de Egipto. Sin embargo, el proyecto se vio interrumpido por la intervención del gobierno egipcio, con lo cual quedó un velo de misterio que permanece hasta nuestros días.
Mientras el mundo progresa, el aura enigmática de la Esfinge y las profecías de Cayce se mantienen como combustible para calorosos debates y estudios diligentes. La idea de descubrir el Salón de los Registros y sus secretos de la civilización perdida sigue seduciendo la imaginación colectiva. Con el paso del tiempo y la mejora continua de la tecnología de exploración arqueológica, la posibilidad de desenmascarar los secretos ocultos de la Esfinge sigue latente.
Las visiones de Edgar Cayce enriquecieron profundamente el misticismo alrededor de la Esfinge, desdibujando los límites entre hechos históricos y mitología. A medida que nos acercamos al umbral de nuevos descubrimientos, la Esfinge permanece como un centinela enigmático de secretos históricos que todavía están por revelarse, instándonos a descifrar los misterios que ha guardado durante generaciones.