La comunidad arqueológica está boquiabierta ante una revelación hecha por un grupo de especialistas. Que desentrañó un enigma histórico vinculado a una antigua punta de flecha de la Edad del Bronce, localizada en Suiza hace más de un siglo. Lo asombroso de este artículo es su composición de un material celestial muy escaso en la época. Un meteorito de hierro que, se cree, cayó en la actual región de Estonia. Y posteriormente recorrió más de 1,600 kilómetros hasta llegar a su destino final en los Alpes suizos.
El estudio, publicado recientemente en Journal of Archaeological Science, es una ventana a la prehistoria del comercio y la tecnología en Europa. Esta punta de flecha localizada en la aldea de Mörigen, que floreció entre el 900 y 800 a.C., proporcionó detalles sorprendentes sobre las rutas comerciales que se extendieron en la región hace miles de años. Rutas que posibilitaron el transporte del preciado metal de Estonia a Suiza.
La punta de flecha hecha de un meteorito.
En aquella época prehistórica, el hierro era un recurso escaso y valioso. Por eso, los antiguos pobladores sacaban el mayor provecho de los recursos más accesibles y abundantes. Así, los meteoritos de hierro, compuestos principalmente por hierro, níquel y trazas de otros metales, se convirtieron en fuente esencial para la forja de herramientas y armas durante la Edad del Bronce.
Lo que hace de este descubrimiento algo tan intrigante es su excepcional origen europeo. Mientras que artefactos similares suelen encontrarse en regiones más orientales como Medio Oriente o Asia, este tipo de hallazgos en territorio europeo son extremadamente raros. Otorgando a la punta de flecha una relevancia sin igual par la arqueología local.
El detallado rastreo de artefactos de hierro meteorítico, dirigido por el destacado geólogo Beda Hofmann del Museo de Historia Natural de Berna, proporciona una idea del recorrido de este meteorito. Se descubrió que la composición de la punta de flecha coincidía con una clase específica de meteorito de hierro conocida como meteoritos IAB.
Tres importantes meteoritos IAB que cayeron en Bohumilitz (República Checa), Retuerta del Bullaque (España) y Kaalijarv (Estonia), comparten similitudes con la punta de flecha. Sin embargo, los investigadores creen que el meteorito Kaalijarv, que impactó la Tierra alrededor del 1500 a.C., sería la fuente de este metal de los cielos.
Rutas comerciales en la prehistoria europea.
El análisis geológico y la datación del impacto del meteorito Kaalijarv sugieren que su alta fragmentación posibilitó la creación de objetos pequeños y afilados, como las puntas de flecha. Lo que sugiere la existencia de una intrincada red de comercio que facilitó el transporte del valioso metal a lo largo de más de 1,600 kilómetros.
Se teoriza que estas rutas comerciales también sirvieron para el transporte de otros materiales valiosos, como el ámbar del Báltico. Un intercambio cultural y económico que trascendió las fronteras y que ayudó a dar forma a la historia antigua de Europa.