El humano promedio posee superpoderes que pasan desapercibidos a simple vista. A diferencia de lo que muchos creen, no se requiere de extrañas mutaciones genéticas para gozar de estas habilidades. La propia evolución nos otorgó algunos dones fascinantes que aprovechamos constantemente en nuestro día a día. ¿Te parece imposible que seas poseedor de algo extraordinario? Te invitamos a leer este artículo.
Existirás por siempre.
El cuerpo humano promedio está compuesto por 7,000 cuatrillones de átomos (un cuatrillón es un 1 seguido de 24 ceros). Y cada uno de esos átomos existe desde hace miles de millones de años. En tu cuerpo se imbuye el conocimiento y la tecnología generadas en este Universo a lo largo de eones. De hecho, cuando pierdas la condición que los humanos definimos como “vida”, esos átomos seguirán existiendo hasta que se extinga la última estrella del cosmos y más allá.
Puedes leer la mente de otros.
En la “teoría de la mente” se describe la habilidad de los seres humanos para comprender los puntos de vista y creencias de otras personas. Al diferir de las nuestras, esto resulta esencial para entender como piensa el resto. Es algo que usamos con tanta frecuencia y asimilamos tan bien que ni siquiera nos percatamos de ello.
Pongamos un ejemplo: Pedro y Pablo se encuentran en un estadio disfrutando de un partido de fútbol. Cuando Pablo va al baño, Pedro se percata de que su amigo dejó el teléfono en el reposabrazos de la butaca. Advirtiendo el riesgo de que se lo roben, Pedro lo guarda en el bolsillo de su pantalón. Cuando Pablo regresa, ¿dónde crees que espera encontrar su teléfono?
Si respondes “en la butaca”, estás usando el superpoder de predecir las acciones de otras personas. ¿Qué hará Pablo a continuación? Si respondes “preguntarle a Pedro dónde está su teléfono”, recurres a un superpoder que ni siquiera sabías que tenías. Además de predecir comportamientos, esta habilidad nos ayuda a decir mentiras e identificar engaños.
Este don para predecir el pensamiento de las personas (y consecuentemente sus acciones) funciona como un lubricante social a nivel cultural y de relaciones. Lo mejor es que podemos ejercitarlo hasta perfeccionarlo.
Tu capacidad de visión es asombrosa.
Quizá no puedas expulsar rayos laser de los ojos como lo hace Superman, pero tienes una capacidad de visión maravillosa. Si miras al cielo durante una noche clara, es probable que puedas distinguir a nuestra galaxia vecina: Andrómeda. Posees ojos con potencia suficiente para ver a 2.5 millones de años luz de distancia.
Por si fuera poco, los humanos podemos distinguir 10 millones de colores. Y si uno de tus ojos fuera una cámara digital, alcanzaría los 576 megapíxeles. Eso es algo que nunca vas a encontrar en un iPhone o cámara digital comercial. Si observas bien tu entorno, quizá termines asimilando que ves más de lo que crees.
Eres una máquina de correr largas distancias.
Aunque no lo creas, la evolución nos moldeó para correr largas distancias. Poseemos cuerpos diseñados específicamente para tal fin, superando incluso a corredores excepcionales de la naturaleza como los caballos. Las glándulas sudoríparas esparcidas por todo nuestro cuerpo nos proporcionan uno de los mejores sistemas de enfriamiento de toda la creación. Además, el poco pelaje permite que el calor se disipe a gran velocidad. De hecho, entre más calor hace, mejor corremos.
El gran tamaño de nuestros glúteos y la reducida longitud en los dedos de los pies contribuyen al equilibrio y la estabilidad durante una carrera. El tendón de Aquiles y otras estructuras en nuestros pies y piernas son exclusivas de la especie (simios y chimpancés jamás las desarrollaron) y nos ayudan a impulsarnos hacia el frente. El humano promedio posee en los músculos reservas de glucógeno suficiente como para correr 32 kilómetros. Quizá no pueda dar la vuelta al mundo con eso, pero definitivamente es capaz de cruzar una ciudad.
Puedes alterar el pasado.
En el cerebro humano, la memoria a largo plazo equivale a 1,000 billones de bits separados de información. Sin embargo, tu cerebro no recuerda las cosas tal y como sucedieron. De hecho, estás recordando la última vez que recordaste esa información. En realidad, tus recuerdos no son grabaciones precisas del pasado (como sucedería en un video).
Los recuerdos son el producto de cambiar una y otra vez el pasado, omitiendo cierta información y agregando nueva en cada ocasión. Otra cosa curiosa de los recuerdos: se pueden transferir. Se denominan cambios epigenéticos. Por ejemplo, se sospecha que heredamos ciertas fobias de nuestros ancestros a través de los genes.
Solo queria precisar que una imagen de 576 megapíxeles no necesariamente posee 10 millones de colores. Los MP indican las dimensiones de la imagen, en este caso, una imagen de 24.000 pixeles por 24.000 pixeles. La profundidad de color o la cantidad de colores unicos no se mide en MP.
tengo el superpoder de dormir durante horas e incluso dias sin despertar por hambre o ir al baño
Muy interesante los superpoderes. Creo que también cuando dormimos en el transporte y nuestras manos no sueltan lo que llevamos, aunque dormidos, nuestro subconsciente está al pendiente de lo que hay en nuestras manos.